La cruzada del tiempo y el olvido
¡Bienvenidos al caos de la mente de Analía!
¿Listo para entrar en un universo donde las puertas son solo ilusiones y los recuerdos ya no saben ni dónde están? Prepárate, porque con Analía38 te vas a cruzar con algo que tal vez ya no está en este mundo… o sí. Nadie sabe, ni ella. Y menos aún nosotros.
Analía38 estaba cansada de las fronteras. ¿Qué era el tiempo, al final? Un truco. Un chiste de mal gusto que la humanidad había inventado para ponerle límites a la existencia. Así que un día, mientras bebía café, decidió cruzarlo. Solo un paso más allá del segundo, un empujón de curiosidad.
Cerró los ojos, y cuando los abrió, estaba en un lugar extraño. No era el futuro ni el pasado. Era un hueco entre ambos, un sitio donde las leyes de la física se reían de sí mismas. Ahí, las estrellas no brillaban, pero sí emitían ruidos extraños, como si estuvieran discutiendo entre ellas. Los planetas se movían de lado, y el sol tenía forma de cubo, pero seguía emitiendo calor.
Analía38 caminó hacia una puerta. No sabía qué había detrás, pero algo la llamaba. Era un susurro de "ven, ven, ven" que venía de dentro de su cabeza, un eco de voces perdidas en los pliegues del tiempo. Abrió la puerta, y lo que vio no la sorprendió en lo absoluto. Era ella misma, pero sin rostro, sin memoria, una especie de nube de pensamiento flotando en el aire. Y eso le pareció perfectamente normal.
El problema vino cuando trató de salir por la misma puerta. Ya no estaba. La puerta había desaparecido. Se dio cuenta de que estaba atrapada en una realidad que había inventado mientras viajaba por su mente. Pero no le importaba. Después de todo, ya no existían las reglas del tiempo ni la lógica. Y, como siempre había sospechado, las puertas, al final, son solo ventanas hacia más puertas.
Y así es como, quizás, el tiempo no importa… porque a veces las puertas que cruzamos ni siquiera eran reales. ¿Te quedaste pensando en esto? No te preocupes, seguro que otra Analía aparecerá para desordenarlo todo aún más. ¿La buscas? O tal vez te quedes atrapado en este laberinto de tiempos y olvidos.
Siguiente Analía:
¿Cómo es vivir sin tu sombra? No como un vacío, sino como una alquimia absurda. Aquí lo absurdo no es una anécdota, es la regla. ¿Quién necesita sombras cuando puedes alquilarlas?
Texto generado por ChatGPT en respuesta a interacciones personalizadas.
Cortesía de OpenAI.
https://openai.com/chatgpt
